Iglesia de Santa Rosalía

La iglesia surgió en el siglo XV como pequeño oratorio por un voto hecho a Santa Rosalía por las autoridades de la ciudad con motivo de las recurrentes plagas. Situada en la parte alta del barrio de la Marina, cerca de la plaza Constitución, presenta una fachada que se inspira en las líneas del barroco piamontés con marcos, tímpanos y lesenas dispuestas sobre dos órdenes. Elegantes nichos en la parte superior de la fachada albergan las estatuas de los santos franciscanos Buenaventura y Antonio de Padua. El interior de la iglesia presenta una única nave con bóveda de cañón, cúpula octogonal sobre el presbiterio y cuatro capillas por lado. En la segunda capilla a la derecha de la entrada se han conservado entre 1844 y 1931 las reliquias de san Salvador de Horta, instaladas luego en el altar mayor, renovado para la ocasión por el escultor Andrea Usai. Por este motivo, la iglesia es conocida también con el nombre de San Salvador, uno de los santos más queridos y venerados por los sardos.

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